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Qué debes saber del frenado autónomo de emergencia sin ser mecánico

Por Diego Noguera

El frenado autónomo de emergencia se destaca como uno de los dispositivos de seguridad más contemporáneos y valiosos. Por eso es importante saber de qué se trata, incluso si tu conocimiento de mecánica es nulo.

¿Por qué? Porque el sistema de frenado de emergencia se convierte en un aliado fundamental cuando surgen situaciones inesperadas en la carretera.

Sus capacidades pueden variar según el modelo del vehículo e incluir una mayor sensibilidad en los frenos, un sistema de alerta al conductor o incluso la capacidad de detener el auto automáticamente en caso de riesgo de colisión.

Este mecanismo representa un avance significativo en la seguridad automovilística, marcando un importante hito tecnológico que ha sido posible gracias a las innovaciones de los últimos años.

Entonces ¿qué es el frenado autónomo de emergencia?

El frenado autónomo de emergencia se refiere a un dispositivo que permite al vehículo analizar su entorno y, en caso de detectar un riesgo inminente, tomar la decisión de frenar automáticamente.

👉 Es importante señalar que esta tecnología varía según el vehículo y fabricante. Sin embargo, en términos generales, el frenado de emergencia se activa cuando un automóvil se desplaza a velocidades que no superan los 40 kilómetros por hora.

Esta característica cobra especial relevancia dado que la mayoría de los accidentes ocurren en entornos urbanos, donde la circulación es más lenta, convirtiendo este sistema en una herramienta sumamente valiosa para prevenir colisiones.

¿Y cómo funciona?

El funcionamiento del frenado de emergencia se basa en la integración de una variedad de sensores en los vehículos modernos, lo que proporciona un mayor entendimiento del entorno circundante.

Estos sensores incluyen cámaras ópticas, láser y el uso de radares para recopilar información crucial del entorno del vehículo. Sin embargo, esta información sería inservible sin la presencia de un computador a bordo que sea capaz de distinguir qué objetos representan un peligro potencial y cuándo es necesario activar los frenos.

En general, el frenado autónomo de emergencia no se produce de forma brusca. En primer lugar, se alerta al conductor mediante señales luminosas o sonoras, con la expectativa de que el conductor comprenda la situación de peligro y reduzca la velocidad de manera voluntaria.

Solo si el vehículo continúa avanzando en la misma dirección y a una velocidad elevada, se activa el sistema de frenado. Específicamente, este mecanismo utiliza el Control de Estabilidad Electrónico (ESP) como base para lograr que los neumáticos dejen de girar.

¿Y todos los autos lo tienen?

Lamentablemente, no.

La presencia de este mecanismo de seguridad depende de la existencia de dispositivos específicos en el vehículo, los que a su vez pueden aumentar su precio.

Por esta razón, en la actualidad, se suele encontrar el frenado autónomo de emergencia únicamente en algunos modelos premium. Sin embargo, existen marcas que están haciendo una apuesta decidida por el frenado de emergencia, integrándolo en toda su gama de vehículos.

Volvo, conocida por su enfoque en la seguridad, está dedicando considerables esfuerzos a mejorar este sistema. La compañía ha desarrollado tecnología que puede distinguir entre diferentes obstáculos en la carretera, lo que permite que sus frenos anticolisión diferencien si el objeto en frente es otro vehículo o un peatón.

Otro fabricante que se destaca como uno de los principales impulsores del frenado autónomo de emergencia es Mercedes. En particular, su Clase E sobresale por ofrecer el paquete Drive Pilot, que es capaz de abarcar todo el entorno circundante del automóvil.

El sistema de conducción autónoma de la marca incluso permite que el vehículo se detenga si el conductor no tiene las manos en el volante.

Como ves, el frenado autónomo de emergencia es una evolución e innovación muy interesante en el mundo vehicular, que con el paso del tiempo, seguramente podremos presenciar en más y más vehículos.